A lo largo del día, trabajemos o no, lo cierto es que invertimos mucho tiempo en el sofá. Todo ello sin reparar en que es posible que la postura que adoptemos influya de manera directa en la salud tanto del cuello como de la espalda.
José Casaña Granell, secretario general del Consejo General de Colegio de Fisioterapeuta de España señala: “Debemos tener presente que aquellos sofás que no aseguren un buen apoyo a la columna vertebral y al cuello fomentarán la adquisición de malas posturas y, con estas, la aparición de molestias y dolor en dichas zonas”. Asimismo, indica: “Un error que cometemos cada vez más a la hora de comprar un sofá es optar por sofás suaves o blandos y aunque se crea que la suavidad de estos se asocia a una mayor comodidad, esto no es así. Este tipo de muebles conducen a una serie de molestias a largo plazo, debido a que solemos apoyarnos sin cuidar nuestra postura, encorvándonos, doblándonos o colocándonos de cualquier forma, en lugar de acomodarnos con un buen apoyo y así facilitar una buena postura”.
Esta es la postura que minimiza los dolores en la espalda
La posición idónea en un sofá para disminuir los dolores según los expertos se centra en apoyar los pies en el suelo y mantener la espalda por completo en el sofá. Para conseguir que la postura sea la correcta, es posible que tengamos que emplear cojines, pero gracias a esta postura, conseguiremos que nuestro cuerpo esté alineado perfectamente. Esto se debe a que mantendremos la cabeza en línea con los hombros y la columna vertebral, así como las caderas en una posición neutral.
En caso de elegir sofá o sillón, indican que el sillón es el que facilita un mantenimiento mejor de la postura que el sofá. Indican que no existe el sofá perfecto y que su uso prolongado causará inevitablemente molestias y dolores de índole músculo-articular. Respecto a la chaise longue, puede ayudarnos a tener una mejor postura durante un breve periodo de tiempo, pero las personas lo utilizan para dormir generalmente y lo mejor para descansar profundamente es la cama.
Por otra parte, se recomienda utilizar cojines siempre que contribuyan a tomar una postura adecuada, como para apoyar la zona cervical de forma que la cabeza esté alineada o bien, situarlo en la zona lumbar para que esté apoyada firmemente. A pesar de que los cojines son cómodos, si los colocamos de manera errónea nos podrán causar dolores.
Por último, respecto a la altura de la televisión respecto al sofá, es importante que sea la adecuada para evitar dolores de cuello. Al comprar un televisor, nos fijaremos en que podremos ajustarlo a la altura que no nos obligue a flexionar la cabeza o tenerla muy extendida, Los expertos señalan lo siguiente respecto a ello: “Debemos calcular que nuestros ojos no estén justo en el medio de la pantalla, sino a un tercio del extremo superior de esta. Tengamos en cuenta que compartimos este dispositivo con el resto de familiares y que no todos tienen la misma altura; por eso, recomiendo poner la televisión a la altura de una persona estándar y emplear cojines para acomodar bien la zona cervical de los que lo necesiten”.