Las vacaciones son una de las épocas más esperadas. Bien sea en nuestra ciudad o al viajar, necesitamos descansar y recobrar la energía que hemos gastado durante todo el año. Sin duda, el lugar idóneo para hacerlo es el sofá, ya que en él podemos leer, estar con nuestra pareja o bien, viendo la televisión. Sin embargo, en verano es posible que en este lugar tengamos calor en exceso, debido en parte a los tejidos que contenga.
Las fundas se convertirán en nuestras aliadas para combatir el calor
Debido a las altas temperaturas que existen en múltiples ciudades españolas, lo lógico es que nos agotemos y busquemos un lugar en el que descansar. La cama es uno de los sitios estrella, pero especialmente para hacer la siesta, el sofá es el rey de la casa. Anteriormente, comentábamos que en los sofás es posible que tengamos calor, pero gracias a distintas fundas para sofá compuestas por tejidos fresquitos para verano, podremos disfrutar de este lugar.
Entre los tejidos menos apetecibles para descansar en el sofá en verano, encontramos los de terciopelo, los de piel, polipiel, de tejidos cálidos y tonalidades oscuras. Aportan una dosis extra de calor y, además, favorecen la sudoración, con lo que podremos estropear en ciertos casos los tejidos del sofá. No hace falta comprar un sofá para invierno y otro para verano, sino que lo más idóneo es añadir una funda para sofá.
A la pregunta de cuáles son los sofás que pueden cubrirse de esta manera, podríamos decir que todos, puesto que existen fundas en el mercado con tejidos que aúnan las características idóneas. Asimismo, son elásticas y se adaptan perfectamente a todos los sofás, independientemente de cuál sea su diseño. Así, hallamos las elásticas, perfectas para sofás con medida estándar, las multielásticas, que son más adaptables y enfocadas a sofás con asientos fijos y, por último, las que son muy elásticas, que están compuestas por tejido superstretch.
Además de ello, no es necesario que limitemos la colocación de fundas para sofás. Podemos añadirlas en sillones, orejeros, sillones con respaldo, sillas sin respaldo… Las posibilidades son infinitas. Además, al encontrar fundas que son más rellenas, podemos disfrutar además de la dosis extra de frescor, un toque de comodidad. Sin duda, se convertirán en nuestras mejores compañeras durante los meses estivales.
¿Cómo podemos limpiar las fundas del sofá?
A la hora de proceder a la limpieza de las fundas del sofá, basta con encender la aspiradora para poder atrapar todo el polvo que pueda haber en ella. Por su parte, los cojines tendremos que sacudirlos varias veces y colocarlos de nuevo en el sofá. Una vez hagamos todo ello, miraremos la composición y etiqueta de la funda para saber si se puede lavar en la lavadora y qué tipo de indicaciones nos especifica.
Si estamos pensando en comprar fundas para nuestro sofá, es importante que nos fijemos bien en este aspecto, ya que si puede lavarse en casa ganaremos en comodidad y sobre todo, en dinero.
