Mucha gente lo pasa por alto, pero los muebles de un hogar se van deteriorando con el paso del tiempo debido a su uso. Sin embargo, con ciertas pequeñas técnicas de cuidado y limpieza de mobiliario, podemos conseguir que los muebles de nuestra casa duren unos cuantos años más. Dependiendo del material de cada mueble, habrá que tener en cuenta ciertos aspectos y prestar atención a qué productos se pueden utilizar dependiendo de la superficie del mobiliario.
Para que no se te pase nada por alto, te dejamos en este artículo varios consejos para el cuidado de tu mobiliario. ¡Toma nota!
1. Ten cuidado con la luz
A la hora de planificar la instalación lumínica de tu vivienda, tendrás que tener en cuenta donde colocarás cada mueble ya que la luz que elijamos les afectará. No es una cuestión de potencia eléctrica, la cual se elige a la hora de dar de alta la luz en una vivienda, más bien de la intensidad.
No hay que confundir términos, ya que la potencia es lo que nos permitirá tener más o menos electrodomésticos conectados al mismo tiempo en casa mientras que la intensidad dependerá de la bombilla. Si ves que te saltan continuamente los plomos, no dudes en ponerte en contacto con la distribuidora eléctrica de tu zona para que aumenten tu potencia eléctrica contratada, que no afectará a tu mobiliario. En el caso de las provincias de Madrid y Valencia es Iberdrola la encargada, mientras que en Barcelona es Endesa. Puedes encontrar más información sobre Iberdrola en Madrid haciendo clic aquí e Iberdrola en Valencia en este enlace.
Sin embargo, el daño producido en nuestro mobiliario por la luz eléctrica es menor que el que produce la luz solar. Los rayos UVA del sol aceleran la decoloración de las pieles, telas y el resto de materiales con los que están fabricados nuestros muebles. Por ello, se aconseja colocar los muebles donde no reciban luz solar de forma directa. Si esto no fuese posible, se puede optar por colocar una lámina de protección solar en la ventana para así reducir el impacto y proteger los muebles.
2. Presta atención a las temperaturas extremas
Ni el frío ni el calor extremo son buenos para el mobiliario de nuestro hogar ya que las telas pueden desgastarse, agrietarse y volverse frágiles. Por ello, cuando planifiques dónde colocar los muebles en tu casa, tendrás que prestar especial atención a la cercanía con los radiadores, ya sean eléctricos o de gas natural.
3. Cada mueble con su producto de limpieza
Al igual que utilizamos diferentes productos para el cuidado de nuestra piel dependiendo de la zona, hay que utilizar el producto de limpieza adecuado para cada mueble. No se cuidan de igual manera los muebles de madera que los tapizados de cuero o de tela. Por ejemplo, en el mobiliario de cuero nunca hay que pasar el aspirador para limpiarlos porque pueden rayarse; mientras que para los de tela, es recomendable pasar el aspirador al menos una vez a la semana para quitar el polvo.
Por otro lado, hay que prestar especial atención a los muebles de madera, ya que tienen sus particularidades. Nunca hay que poner objetos calientes directamente sobre el mueble porque estropean la madera; utilizar posavasos o manteles. Para limpiar el polvo en los muebles de madera basta con rociar agua sobre un paño húmedo; si vas a comprar un producto específico para el cuidado de la madera, asegúrate que no lleve amoniaco porque destroza el mobiliario. Si quieres saber algunos trucos para el cuidado de tus muebles de madera, échale un vistazo al artículo publicado en 20 Minutos.
