La siesta es una de las tradiciones más extendidas y placenteras del día a día. Quienes tienen la posibilidad y la suerte de poder disfrutarla, sabrán de lo que hablamos. Levantarse diariamente para trabajar y/o estudiar con el madrugón que ello conlleva, hace que después de comer echar una cabezadita sea prácticamente una obligación.
¿Qué beneficios tiene para las personas?
Los médicos, advierten que la siesta es una manera fácil y perfecta para aumentar el estado de concentración y ser más productivos en nuestras actividades. Además, reduce el estrés y mejora el estado de ánimo y el humor.
Por otro lado, mejora considerablemente el ritmo cardíaco, reduce la posibilidad de sufrir un ataque al corazón y, en definitiva, resulta beneficioso para múltiples enfermedades coronarias.
Características y tips de una buena siesta
La siesta perfecta, debe reunir una serie de características muy importantes. La hora, el lugar y cuánto tiempo debe durar se deben tener muy en cuenta para así maximizar tus posibilidades y que por la noche no sea un problema conciliar el sueño. En cuanto a los consejos que se deben tener en cuenta, son los siguientes:
En primer lugar, tratar de mantenerla relativamente corta, es decir, no más de media hora. De lo contrario, puede tener consecuencias negativas como la somnolencia. Para poder descansar, se debe dormir una siesta que oscile entre los 20 y 30 minutos y si se busca aumentar el rendimiento cognitivo, debe ser de 90 minutos. Para garantizar que dura lo estipulado, lo mejor es programar el despertador para que nos avise en el tiempo exacto y no suframos el aturdimiento de una siesta de excesivas horas.
Otro consejo es que la habitación esté a oscuras. En caso de que esto sea difícil, e mejor recurrir a un antifaz que garantice una oscuridad total o si no, bajar las persianas. Si la oscuridad es importante, asilarse del ruido también lo es. Por ello, ver series o películas que tengan una trama interesante, activarán nuestro cerebro e impedirán que podamos conciliar el sueño. Por ello, apagar cualquier aparato electrónico será de gran utilidad para ello. En caso de convivir con más personas y que tengan el televisor encendido, es una buena opción acudir a auriculares noise cancelling.
En cuanto a la postura, es mejor realizarla tumbado y a ser posible, no hacerla en el sofá. Al tumbarnos, nos dormidos más rápidamente y estando sentados se tarda hasta un 50% más de tiempo para conseguir el sueño. Por esta razón, dormir en medios de transporte resulta tan complicado.
La hora de la siesta es un aspecto a tener muy en cuenta. La mejor hora es realizarla entre las 12 y las 4 de la tarde, para que así no perturbe el ciclo del sueño. Hacerlo antes de las 12 resulta excesivamente pronto al momento en que hemos madrugado y después de las 4 podría disminuir la inercia del sueño por la noche.
Para conseguir un sueño placentero, es crucial tener la mente tranquila o bien, estar excesivamente cansado. Para conseguir una mente alejada de problemas, se recomienda anotar todas las tareas pendientes para poder realizarlas una vez hayas despertado de la siesta.
Anteriormente, advertíamos de la importancia que tenía desconectar los aparatos electrónicos, pero no se ha hecho hincapié en la importancia de los móviles y tablets. Desconectar el móvil ayuda a dormir más puesto que nuestro cerebro no presta atención a la posibilidad de que suene. Sin embargo, activa la alarma y, posteriormente, el modo “no molestar”.
Antes de acostarse a dormir la siesta, es importante atender a nuestros niveles de cafeína. Teniendo en cuenta que tarda unos 20 minutos en hacer efecto en nuestro organismo, es importante tomarlo justo antes de dormir o de lo contrario, podría arruinar nuestro sueño reparador.
Atender a estos consejos hará que seas más productivo y te levantes de mejor humor. La siesta es una de las actividades gratuitas más placenteras así que, ¿por qué no disfrutar de ella probándola?